

La migración puede tomar muchas formas, dependiendo del origen y el destino de quienes se mueven. La migración interna ocurre dentro de las fronteras de un mismo país, mientras que la migración internacional implica cruzar fronteras entre países.
Algunas personas se ven obligadas a migrar debido a conflictos, persecuciones o desastres, lo que se conoce como migración forzada. Otras deciden migrar en busca de nuevas oportunidades o una mejor calidad de vida; a esto se le llama migración voluntaria.
¿Por qué migra la gente? Las razones son tan diversas como las propias personas.
La migración tiene efectos profundos en las sociedades.
En el corazón de la migración están las personas, y es vital garantizar que sus derechos sean respetados. Cada migrante merece ser tratado con dignidad, sin importar de dónde venga o hacia dónde vaya. Miles de organismos en todo el mundo trabajan para proteger a quienes se encuentran en situaciones vulnerables.
Nada refleja mejor la migración que las historias de quienes la viven. Desde dificultades enormes hasta momentos de triunfo, las historias personales nos enseñan mucho sobre la resiliencia y el valor de empezar de nuevo.